Las Tostadas Charras son populares en México, porque en la cocina mexicana existe una gran variedad de platillos en los que se utilizan como base.
La Procuraduría Federal de Protección al Consumidor -PROFECO -, sugiere moderar su consumo por las altas cantidades de calorías, sodio y grasa, y principalmente evitar su consumo en niños.
¿Por qué el producto contiene el sello de EXCESO DE CALORÍAS?
Aporta 483 calorías (cal) por cada 100 gramos (g) de producto, por lo que de acuerdo con los límites establecidos en la NOM-051 de etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados se exceden las 275 calorías señaladas para los 100 g.
¿Por qué el producto contiene el sello de EXCESO DE SODIO?
Porque excede los 350 miligramos (mg) de sodio establecidos por la NOM-051 por cada 100 g de producto.
Una cuarta parte (25.5%) de la población adulta en México padece hipertensión y en casi la mitad de los casos las personas desconocen que la tienen. Lo peligroso de la hipertensión (presión alta) es que puede provocar embolias, infartos o eventos cardiovasculares como trombosis, dejando a los pacientes con secuelas graves o llevándoles hasta la muerte.
¿Por qué el producto contiene el sello de EXCESO DE GRASAS SATURADAS?
El producto contiene 2.62 g de grasas saturadas por cada dos tostadas, lo que representa el 20% de las calorías totales del producto. Según el criterio establecido para recibir el sello de grasa saturada se debe exceder el 10% de las calorías totales del producto.

Es importante mencionar que los alimentos naturales, en contraste con este producto, no contienen grasa saturada.
Se observa que contiene colorantes artificiales: amarillo 6 y 5, ambos colorantes altamente alergénicos (especialmente, la tartrazina) y relacionados con el desarrollo de hiperactividad en niños.
El producto es de consumo cotidiano y se le considera un alimento, por lo que los consumidores jamás imaginarían que contiene colorantes dañinos.
Aditivos:
Tartrazina (amarillo 5), amarillo ocaso (amarillo 6): estos colorantes, además de ser derivados del petróleo, impactan negativamente la conducta de niños y niñas, induciendo hiperactividad y déficit de atención.6 También son altamente alergénicos.
Dióxido de silicio: en grandes dosis o exposición directa puede provocar silicosis, es decir, cicatrices en los alvéolos. Éstas pueden impedir que el oxígeno llegue a la sangre y dificultar la respiración. Dependiendo del grado de hipersensibilidad, puede causar la muerte. Además, afecta la diferenciación neuronal y el funcionamiento de las mitocondrias.