Si bien, el agua nos permite estar hidratados y recuperarnos después de una larga caminata o de hacer ejercicio, en exceso, también puede ser perjudicial para nuestro organismo y provocar la muerte.
El exceso de hidratación puede provocar hiponatremia o intoxicación por exceso de agua, esto se da a raíz de beber grandes cantidades de este vital líquido sin sales, pues se reducen los niveles de sodio.
Pero, para una mejor explicación podemos decir que el cuerpo elimina el líquido por medio del sudor o la orina, pero si esto no sucede, la sangre se va diluyendo y es entonces cuando baja la concentración de sodio, potasio y cloro, minerales que son indispensables para las células.
Cuando el sodio es muy bajo, el agua se va al interior de las células para tratar de equilibrar estos niveles y esto causa que las células se hinchen por el exceso de agua.
Las células más afectadas son las que se encuentran en el cerebro ya que son demasiado sensibles y de ahí provienen los síntomas mas graves de la hiponatremia que se pueden expresar como:
- Confusión, mareos
- Convulsiones
- Fatiga
- Dolor de cabeza
- Irritabilidad
- Inapetencia
- Calambres o espasmos musculares
- Debilidad muscular
- Náuseas
- Inquietud, alucinaciones
- Vómitos
Estas reacciones del cuerpo suelen confundirse con desidratación por lo que es común que se siga bebiendo agua sin electrolitos, esto puede llegar a provocar la pérdida del conocimiento y en casos extremos, la muerte
Es recomendable tomar líquidos con electrolitos, especialmente en deportistas que realizan competencias de largo tiempo como maratones o ciclismo.
