Con la llegada oficial de el verano, llega la noche de San Juan. En la madrugada que une al 23 de junio con el 24 es una de las más esperadas para muchos, pues no solo es la víspera del día de San Juan, pues también trae rituales y cultos a la naturaleza que buscan dejar atrás lo malo y encarar un verano lleno de energía positiva y rebosante de suerte.
El agua y el fuego serán los protagonistas de la noche de San Juan, elementos ligados históricamente a la purificación, combinados de distintas maneras en los diferentes rituales.
Purificarse con una rama de laurel
Para alejar los aspectos negativos es frotarse el cuerpo con una rama de laurel y después lanzarla a la hoguera. El laurel nos quitará la energía negativa y el fuego acabará con ella para siempre.
Quemar los deseos
Escribir en un papel un deseo y después quemarlo en la hoguera y saltarla tres veces por encima de ella. Es necesario seguir todos los pasos para que se haga realidad.
Lavarse la cara
Con la intención de purificarse es lavarse la cara sin después mirarse al espejo, con el propósito de que ayude a quien lo lleva a mantener la salud, la belleza y la buena suerte.
Hablarles a las estrellas
Uno de los más sencillos. Solo es necesario una moneda vieja y salir a la calle, colocarse en un lugar con poca contaminación lumínica, estando ahí, darle vueltas a la moneda con una mano y verbaliza tus deseo para el futuro mirando a las estrellas.
