El Gobierno mexicano ha decidido tomar medidas contundentes tras el asalto a su embajada en Ecuador por parte de las fuerzas ecuatorianas. La canciller mexicana, Alicia Bárcena, anunció que México enviará una carta al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, para denunciar este grave incidente ante la Asamblea General, el Consejo de Derechos Humanos y todos los miembros de la ONU.
Durante la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, Bárcena expresó su firme postura: «No existe ninguna justificación para que las fuerzas de policía hayan irrumpido en la embajada de México en Ecuador ni de la dignidad del personal diplomático».
Además de la denuncia ante la ONU, México presentará una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para condenar las acciones del gobierno ecuatoriano. También se buscará el respaldo de las cancillerías de los 32 países que conforman la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Bárcena destacó que los actos cometidos por Ecuador representan una «flagrante violación al derecho internacional», denunciando agresiones físicas al personal diplomático mexicano y la sustracción de una persona a la cual México había otorgado protección en calidad de huésped y asilo político.
La canciller subrayó el uso de la fuerza desproporcionada por parte de las fuerzas ecuatorianas al irrumpir en la embajada: «Entraron a las instalaciones de la embajada por la fuerza, brincándose la barda, abrieron las puertas forzando y lastimando de hecho al personal que se encontraba adentro».
Finalmente, ante la pregunta sobre si México tomaría acciones similares contra los diplomáticos ecuatorianos en territorio mexicano, Bárcena afirmó que sería decisión del gobierno de Ecuador, indicando que México no responderá con el mismo tipo de violencia: «Nosotros no les vamos a aplicar el mismo atropello que ellos hicieron con nosotros».