Ciudadanos de Matehuala han denunciado públicamente la pésima calidad del agua que llega a sus hogares, señalando que en muchos casos está completamente sucia, de color negro y, por lo tanto, inutilizable. A través de diversos testimonios, se ha expuesto que en algunas colonias el agua llega esporádicamente, y cuando lo hace, está contaminada, lo que ha generado gran malestar entre la población.
La falta de acción por parte de Juan Carlos Pérez Mendoza, titular de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento de Matehuala (SAPSAM), ha sido uno de los principales reclamos de los habitantes, quienes aseguran que la situación se ha vuelto insostenible. Varios sectores del municipio enfrentan un grave desabasto de agua potable, mientras que en los lugares donde sí llega, el líquido es de mala calidad, generando el temor de que pueda derivar en enfermedades graves para la población.
El enojo ciudadano ha escalado debido a la percepción de que Pérez Mendoza ha sido omiso en su labor al frente de SAPSAM. Denuncian que, a pesar de la falta de resultados, pretende mantenerse en el cargo por más tiempo. Algunos habitantes aseguran que esta problemática no es nueva y que, bajo la gestión actual, el agua «siempre sale apestosa».
Desde que Juan Carlos Pérez Mendoza asumió la dirección del organismo, no se han concretado beneficios tangibles para los matehualenses. Por el contrario, el municipio ha enfrentado una de las crisis hídricas más severas de los últimos años. A esto se suma una serie de escándalos y polémicas que han salpicado su administración, acusada de malos manejos, irregularidades y posibles actos de corrupción que han impactado las finanzas públicas.
El historial de Pérez Mendoza al frente de SAPSAM se ha caracterizado por la falta de proyectos para mejorar el suministro de agua y la aparente preferencia hacia intereses personales y de sus allegados, dejando a amplios sectores de la ciudad sin acceso a un recurso tan básico como el agua potable.