El Jardín Hidalgo, uno de los espacios más emblemáticos y patrimoniales del municipio de Venado, en el Altiplano potosino, continúa siendo demolido. Vecinos del parque acusan directamente al alcalde Guillermo Martínez Guerra de destruir este espacio histórico para la construcción de un estacionamiento, un proyecto que consideran de mínimo beneficio para la ciudadanía.
Las críticas no se han hecho esperar, ya que la ciudadanía denuncia la falta de transparencia en el proceso. «¿Quién ordenó este destrozo en el Jardín Hidalgo?», preguntan, señalando la ausencia de una consulta pública o la intervención de departamentos como el de Ecología o Medio Ambiente del Ayuntamiento. Los vecinos expresan su indignación ante lo que consideran una decisión arbitraria del alcalde, quien a pocos meses de dejar el cargo, parece actuar «a su conveniencia».
Los habitantes también recuerdan que el Ayuntamiento había prometido hacer un área peatonal en la zona, compromiso que aparentemente fue incumplido. «Primero no cumplió con hacerla peatonal y dejó un estacionamiento, ahora está destruyendo el jardín», comentan, sumando su preocupación por el destino de la madera de los árboles talados. Según los vecinos, «están haciendo tablones con la madera del arbolito, ¿para quién son o a quién le vendieron esa madera?»
Además, la ciudadanía acusa al Ayuntamiento de ocultar información respecto al proyecto, ya que muchos vecinos se enteraron de la demolición hasta que las obras habían comenzado. Según informes, el Ayuntamiento habría incumplido un convenio con la asociación vecinal, lo que ha generado aún más descontento entre los habitantes, que ven con frustración cómo un espacio con valor histórico y cultural está desapareciendo ante sus ojos.