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Claudia Sheinbaum defiende reforma judicial y niega crisis constitucional

La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que no existe ninguna crisis constitucional en la aprobación e implementación de la reforma judicial. «Yo no veo ninguna crisis constitucional porque se cumplieron todos los requisitos y normas que se establecen para aprobar una reforma constitucional», afirmó la mandataria, destacando que su movimiento cuenta con la mayoría calificada en el Congreso para avalar los cambios, gracias a la correlación de fuerzas derivada de las últimas elecciones.

Sheinbaum desestimó las críticas de jueces y magistrados que se oponen a la reforma, afirmando que «la reforma judicial va», y que algunos miembros del Poder Judicial tendrán que ceder sus puestos a nuevos jueces. “Son los jueces y magistrados que van a tener que ceder su espacio a los nuevos jueces, pues muchos de ellos no están de acuerdo. Hay muchos jueces que sí están de acuerdo”, señaló.

Durante su intervención, citó un informe de la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, que reconoce que el 46% de las plazas en el Poder Judicial están relacionadas con el nepotismo. Según Sheinbaum, «en esa proporción, la selección del personal tiene que ver con que son hijos, hermanos, tíos, sobrinos de alguien, esos son los criterios».

Además, Sheinbaum criticó a quienes cuestionan la representación de Morena en el Congreso, subrayando que la asignación de legisladores plurinominales se realizó con las mismas reglas usadas en 2012, 2015 y 2018. “¿Quién decidió con base en la constitución, en las reglas que se aplicaron en 2012, en 2018, con las mismas leyes? ¿Quién decidió que avanzara el llamado plan c? El pueblo”, enfatizó, argumentando que los ministros de la Corte no tienen facultades para detener el cambio constitucional.

Sheinbaum también reprochó que los jueces y magistrados continúan en paro después de tres meses, pero siguen cobrando sus sueldos. “¿Cómo? ¿Dónde está el acceso a la justicia que tanto defienden?”, cuestionó, reiterando que «no hay una crisis constitucional» y que el Consejo de la Judicatura cumplió con el mandato constitucional al enviar la lista de vacantes de jueces y magistrados.

Por otro lado, Sheinbaum reconoció que aún faltan elementos por completar en la reforma judicial, como la Ley Orgánica de la SCJN y la creación de un tribunal interno de vigilancia en el Poder Judicial. Aclaró que este tribunal no será un mecanismo de coerción, como se ha especulado, sino un instrumento para garantizar la transparencia y el buen funcionamiento del sistema.

Finalmente, subrayó que uno de los objetivos principales de la cuarta transformación es alcanzar la justicia en todas sus formas: justicia social, para las mujeres, justicia ambiental y un sistema de justicia accesible para todos, sin importar su origen, clase social, religión o identidad. «Esto es la cuarta transformación: la búsqueda de justicia», concluyó.