Potosinos han levantado la voz luego de que se reportaran efectos adversos graves tras la aplicación de vacunas contra el COVID-19 de origen cubano en centros de salud públicos. Afectados afirman que estas vacunas, presuntamente caducas, están provocando reacciones que paralizan el cuerpo, generando preocupación en la comunidad.
Una de las afectadas relató que el pasado martes 8 de octubre, sus padres acudieron a un centro de salud para vacunarse contra la influenza. La mujer, quien los acompañaba, dejó a sus padres en la entrada mientras estacionaba el automóvil. Al regresar, se encontró con que no solo habían sido vacunados contra la influenza, sino también contra el COVID-19 con la vacuna «Abdala», de origen cubano.
El padre de la mujer no presentó ninguna reacción, pero su madre comenzó a experimentar vómitos y una parálisis corporal casi inmediata. A pesar de acudir a diversos médicos, hasta ahora no han recibido una respuesta clara sobre la causa de estos síntomas. La afectada incluso mencionó que su madre ha perdido el control de esfínteres y necesita usar pañal desde entonces.
Los responsables del centro de salud no han dado explicaciones ni asumido responsabilidad por lo ocurrido. La mujer asegura que en instituciones como el IMSS y el ISSSTE no se están aplicando estas vacunas, ya que son dosis provenientes de Cuba que presuntamente llegaron caducas.
Ante esta situación, la ciudadanía ha comenzado a solicitar públicamente que se evite la aplicación de estas vacunas, mientras esperan una respuesta de las autoridades sanitarias sobre lo ocurrido.