Netflix ha dado un paso significativo al anunciar la llegada de la WWE, la compañía de entretenimiento deportivo más grande del mundo. Con la incorporación de los primeros tres eventos, la plataforma ha generado una gran expectativa entre los fanáticos de la lucha libre.
A partir de enero de 2025, los seguidores podrán disfrutar de una programación intensa y sin precedentes, que ofrecerá acceso a los eventos más destacados de la WWE. El debut oficial está programado para el viernes 3 de enero, cuando SmackDown se transmita por primera vez en Netflix. Este evento será seguido por Raw, el show insignia de la WWE, el lunes 6 de enero, y la semana culminará con NXT el martes 7.
Uno de los aspectos más comentados de esta nueva colaboración es el cambio en el tipo de contenido que se ofrecerá. La programación de la WWE en Netflix será más agresiva, con menos restricciones en comparación con las emisiones tradicionales. Esto podría marcar un regreso a las raíces más crudas y emocionantes de la lucha libre, un estilo que resonó profundamente durante la Attitude Era de la WWE.
Con esta alianza, tanto WWE como Netflix buscan expandir sus horizontes y ofrecer a los aficionados una experiencia más completa y accesible. Esta estrategia tiene como objetivo atraer a nuevos espectadores que tal vez no estén familiarizados con el producto, pero que podrían interesarse en el vibrante mundo del wrestling. La llegada de la WWE a Netflix promete revitalizar la oferta de entretenimiento en la plataforma y satisfacer a una base de fans ansiosa por más acción en el cuadrilátero.