El Papa Francisco inauguró oficialmente el Año Santo 2025 el martes, al abrir la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro durante la Misa de Nochebuena. Este Jubileo, que se celebra cada 25 años, se espera atraiga a 32 millones de peregrinos a Roma, desafiando tanto la resistencia del pontífice como la capacidad de la ciudad para recibir a tantos fieles.
Con el tema central de la esperanza, Francisco dedicará el Jubileo a esta causa, abriendo otra Puerta Santa en la prisión de Rebibbia en Roma el jueves, buscando ofrecer esperanza a los reclusos. Esta iniciativa subraya el compromiso del Papa con el ministerio penitenciario, un aspecto central de su vocación sacerdotal.
El Jubileo no está exento de desafíos. La seguridad en Roma está reforzada tras un ataque en un mercado navideño en Alemania, con patrullas policiales, cámaras de vigilancia y detectores de metales en los accesos a la Plaza de San Pedro. Además, la salud de Francisco, quien recientemente cumplió 88 años, es una preocupación, ya que un resfriado lo obligó a bendecir desde el interior en su última aparición pública.
Uno de los momentos más destacados del Jubileo será la canonización de Carlo Acutis, el adolescente millennial y experto en internet, prevista para abril durante el Jubileo de los jóvenes. Además, el Papa celebrará misas y eventos durante la Navidad y el Año Nuevo.
El Año Santo de 2025, que rememora las ediciones anteriores del Jubileo, representa un esfuerzo significativo para revitalizar tanto el paisaje espiritual como urbano de Roma.