Tiempo de hablarTitulares

Columna I Tiempo de Hablar

Ni fu ni fa con Crisógono Sánchez Lara, titular del Sistema Educativo Estatal Regular (SEER). Mientras en el Altiplano cientos de alumnos no tienen maestro y, por supuesto, tampoco clases normales, él se burla en la capital diciendo que lo que sobra son maestros. Pero no se ha dado una vuelta cuando los padres de familia han tomado las instalaciones de planteles educativos. Es ahí donde debe estar y justificar frente a ellos que tiene una enorme plantilla docente, explicándoles por qué los alumnos no tienen maestro.

El viernes, en el Congreso del Estado, la charquense Berenice Castillo Cortés recibió el premio Matilde Cabrera 2025, un logro por su lucha en favor de los derechos de las personas con discapacidad. Berenice habló en la tribuna y expuso que qué bueno que los diputados legislaran para que las curules también fueran ocupadas por personas con discapacidad. Se vieron muchas caras de sorpresa entre los diputados, como que sí les llegó el comentario. Ojalá que esto sirva para que, en verdad, se trabaje en iniciativas a corto plazo y que este sector de la población pueda tener oportunidades en todos los sentidos.

Por cierto, el que no fue ni para posar en la foto es el diputado del Distrito 01, Tomás Zavala, ni porque la ganadora es de Charcas, lugar donde anduvo haciendo campaña. Se vio mal desairar el llamado a la Sesión Solemne, cuando mínimo pudo decir que está a favor de las personas con discapacidad.

En Cedral, se le anda acabando el encanto a la presidenta Cinthia Segovia, pues no está aportando mucho en el tema del agua. La sequía amenaza a los campesinos. Por otra parte, en Palo Blanco llevan por lo menos cuatro meses sin agua. Todos han sido engañados, tanto por el expresidente Howard Aguilar como ahora por Cinthia. No tiene un plan estratégico o, mejor dicho, no quiere ayudarles, porque la solución es apoyarlos con pipas que abastezcan de agua, pero se sordea y no se ve que le interese atender la problemática.

Como de costumbre, el IMSS vuelve a ser blanco de quejas. Una, porque no tiene dinero para pagar incapacidades y le vale que la gente se quede sin su pago; de por sí es poco, y todavía lo niegan. Ya no es solo la mala atención, la falta de médicos ni el desabasto de medicamentos, ahora ya ni dinero hay, pero sí reciben lo que retienen los patrones. Otra queja es que, en Matehuala, no quieren atender a gente de comunidades de Doctor Arroyo porque no son potosinos. Los afectados tienen mejor acceso a Matehuala que a su cabecera municipal, pues para llegar allá deben viajar al menos tres horas, y parte de ellas por caminos espantosos, gracias a la pésima administración del alcalde Juan Vargas, que no le quiere invertir ni un peso a los caminos.

Otro tema importante es el cuidado del agua. Recientemente se han reportado fugas en viviendas de Matehuala, cuya reparación corresponde a los moradores. Es fundamental que también, desde esa trinchera, se le dé el cuidado necesario. De por sí, Juan Carlos no se pone las pilas y, si no se cuida el agua en donde son dichosos de tenerla, en un futuro habrá menos.

Hasta la próxima con más Tiempo.