El dolor de garganta y la tos son malestares comunes, especialmente en temporadas de frío o cambios climáticos. Afortunadamente, existen remedios caseros y médicos que pueden ayudar a aliviar estos síntomas de manera rápida y efectiva. A continuación, te compartimos algunas recomendaciones avaladas por especialistas.
1. Hidratación y remedios naturales
- Bebe líquidos tibios: Té con miel y limón, caldos o agua tibia con jengibre ayudan a suavizar la garganta y reducir la irritación.
- Miel: Tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Una cucharada sola o mezclada en infusiones puede aliviar la tos.
- Gárgaras con agua salada: Disolver media cucharadita de sal en agua tibia y hacer gárgaras 2-3 veces al día reduce la inflamación.
2. Cuidados básicos
- Humidificador: El aire seco empeora la tos. Usar un humidificador o inhalar vapor (con precaución) ayuda a mantener las vías respiratorias húmedas.
- Descanso: El reposo permite que el cuerpo se recupere más rápido.
3. Medicamentos de venta libre
- Analgésicos: Paracetamol o ibuprofeno pueden reducir el dolor y la inflamación.
- Pastillas para la tos o sprays: Contienen ingredientes como mentol o benzocaína que adormecen la garganta temporalmente.
4. ¿Cuándo consultar a un médico?
Si los síntomas persisten por más de una semana, se acompañan de fiebre alta, dificultad para respirar o flemas con sangre, es crucial buscar atención médica, ya que podría tratarse de una infección bacteriana (como estreptococo) que requiere antibióticos.
Aunque el dolor de garganta y la tos suelen ser molestias pasajeras, no deben ignorarse. Combinar remedios caseros con cuidados básicos suele ser suficiente, pero siempre es importante escuchar al cuerpo y acudir a un profesional si es necesario.