Enclavado en el extremo sur de la Península de Baja California, se alza una de las formaciones rocosas más emblemáticas de México: el Arco de Cabo San Lucas. Esta escultura natural, esculpida pacientemente por millones de años de olas y viento, no solo asombra por su belleza, sino también por su significado geológico y simbólico.
Conocido popularmente como “el fin de la tierra”, el Arco marca el punto exacto donde el Golfo de California se encuentra con las aguas del Océano Pacífico. Esta colosal estructura ha sido testigo de más de 20 millones de años de evolución del paisaje costero, convirtiéndose en uno de los atractivos más representativos de Baja California Sur.
Su silueta imponente es una parada obligada para viajeros nacionales e internacionales que visitan Cabo San Lucas. Las excursiones en lancha, los atardeceres que pintan el cielo de colores cálidos y la rica biodiversidad marina que lo rodea hacen del Arco un lugar fascinante tanto para la fotografía como para la contemplación.
