Cinco loros africanos fueron temporalmente separados en un zoológico de Lincolnshire, Inglaterra, luego de protagonizar una situación tan insólita como real: comenzaron a insultar a los visitantes… ¡en coro! Las aves no solo lanzaban palabrotas con total sincronía, sino que además remataban sus bromas con carcajadas, como si fueran conscientes del alboroto que causaban.
El peculiar grupo fue bautizado por el personal como el “combo mal hablado”, y aunque al principio los cuidadores tomaron el asunto con humor, la situación escaló rápidamente cuando los loros comenzaron a enseñarle las groserías a otros ejemplares. Ante el temor de que todo el aviario terminara convertido en una verdadera “escuela de insultos”, el zoológico tomó medidas y decidió separar a las aves para frenar su mala influencia.
El director ejecutivo del parque explicó que aunque muchos visitantes se reían al escuchar a los loros insultar, el personal no podía garantizar que todos reaccionaran igual, especialmente en presencia de niños. Por ello, los animales fueron reubicados temporalmente en diferentes áreas del zoológico, con la esperanza de que olviden sus malas palabras.
La historia se ha vuelto viral y ha generado una mezcla de risas y asombro en redes sociales, donde los usuarios no paran de comentar el ingenio, y la travesura, de estas carismáticas aves.