La presencia de perros callejeros en Real de Catorce se ha convertido en una problemática cada vez más visible, con decenas de animales deambulando desde antes del ingreso al túnel Ogarrio y en diferentes puntos del interior del pueblo mágico.
Según versiones de habitantes y visitantes, muchos de estos perros habrían sido abandonados por sus dueños en las inmediaciones del pueblo, lo que ha generado una población creciente de lomitos en situación de calle. Los animales, en su mayoría, presentan signos de desnutrición, sed extrema y agotamiento debido a las altas temperaturas que se registran en la región durante el día.
Muchos de los perros callejeros logran sobrevivir gracias a la solidaridad de algunos vendedores locales, quienes, con lo poco que tienen, les comparten agua y comida. Sin embargo, esta ayuda resulta insuficiente ante la gran cantidad de lomitos en situación de abandono, pues es prácticamente imposible abastecer el hambre de tantos animales que deambulan diariamente por el pueblo bajo condiciones extremas.
La situación ha generado preocupación entre la ciudadanía, quienes a través de redes sociales y mensajes dirigidos a las autoridades locales, han solicitado la intervención del alcalde Javier Sandoval para que se implemente un programa de atención y protección animal que les garantice una vida digna, con alimentación, resguardo y atención médica.
Hasta el momento de la elaboración de esta nota, no se ha anunciado una respuesta oficial por parte del Ayuntamiento, pero los habitantes de Real de Catorce insisten en que se trata de un problema urgente que afecta no solo el bienestar de los animales, sino también la imagen turística del municipio y la salud pública.