El mundo del fútbol está de luto. Diogo Jota, futbolista del Liverpool FC y de la selección nacional de Portugal, falleció la madrugada de este miércoles junto a su hermano, también jugador profesional, André Silva, en un trágico accidente de tráfico ocurrido en la autovía A-52, a la altura de Cernadilla, en la provincia de Zamora, España.
Según los primeros reportes del Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León, el accidente ocurrió alrededor de las 00:40 horas, cuando varios testigos alertaron sobre un auto deportivo que se había salido de la carretera y que, tras el impacto, comenzó a arder. Al llegar al lugar, los servicios de emergencia encontraron el vehículo, un Lamborghini, completamente envuelto en llamas.
Fuentes de la investigación citadas por la agencia EFE indicaron que el siniestro tuvo lugar en el kilómetro 65 de la autovía Rías Bajas (A-52), en sentido Benavente. La principal hipótesis es que uno de los neumáticos del automóvil habría reventado en plena maniobra de adelantamiento, lo que provocó que el conductor perdiera el control y se saliera de la vía. El vehículo se incendió casi de inmediato.
Bomberos y servicios de emergencia trabajaron para sofocar el fuego, que incluso se extendió a la vegetación cercana, y colaboraron con la Guardia Civil en las labores de rescate. Lamentablemente, al momento de ser rescatados, los cuerpos de Diogo Jota y André Silva ya no presentaban signos vitales. La identificación oficial fue confirmada horas más tarde.
Diogo Jota, cuyo nombre completo era Diogo José Teixeira da Silva, nació el 4 de diciembre de 1996 en Massarelos, Portugal. A lo largo de su carrera profesional destacó por su disciplina, inteligencia táctica y una capacidad goleadora que lo consolidaron como una de las figuras clave del Liverpool y un referente de la selección portuguesa. Su versatilidad en el campo le ganó el respeto de compañeros, entrenadores y aficionados en toda Europa.