Como si se trata de una enorme empresa lucrativa o de un nosocomio particular, directivos y personal administrativo del Hospital Central Dr. Ignacio Morones Prieto se negó a entregar el cuerpo de una joven estudiante que perdió la vida luego de permanecer varias semanas internada a causa de una enfermedad que debilitó considerablemente su estado de salud; el motivo, según refirieron, no hubo quien pagara los gastos que se desprendieron del servicio que, se supone, debería ser gratuito.
La información que ha trascendido en torno a este caso detalla que la joven de nombre Celia, estudiante de licenciatura en la Escuela Normal del Estado, foránea y de familia humilde, comenzó a presentar diversas complicaciones de salud desde hace varias semanas, razón pro la que tuvo que se internada de emergencia, sin embargo, dada la gravedad de su situación y los estragos que le provocó la enfermedad, no pudo reponerse y, lamentablemente, perdió la vida.
Ante la tragedia, los compañeros se cooperaron para apoyar en los gastos funerarios, sin embargo, los familiares se toparon con que el hospital no les iba a entregar el cuerpo hasta que no se liquidara por completo la cuenta que, para ese momento, ha ascendía a varios miles de pesos, sin embargo, dada su situación y la falta de recursos, les resultó imposible cubrir el requisito. Pese a que apelaron a la solidaridad del Hospital Central y de la Secretaría de Salud, no consiguieron el apoyo.
Vía redes sociales, los compañeros de Celia organizaron una colecta en la que se solicita el apoyo de los potosinos para reunir los fondos suficientes que les permitan rescatar el cuerpo de la joven del secuestro en que se encuentra pues no se le ha podido dar continuidad al proceso ni darle cristiana sepultura.