El debut de Rodrigo Huescas en la Champions League dejó una grata impresión en el empate 2-2 entre el Copenhague y el Bayer Leverkusen, disputado en el Parken Stadion. El mexicano participó con una asistencia en la segunda anotación de su equipo, que estuvo muy cerca de dar la sorpresa en la primera jornada del torneo europeo.
El conjunto danés se adelantó temprano en el marcador. Al minuto 8, Achouri desbordó por la banda y asistió a Larsson, quien definió para el 1-0. El Copenhague dominó la primera mitad y pudo aumentar la ventaja con un disparo al travesaño de Elyounoussi y un mano a mano fallado por Moukoko. El Leverkusen apenas respondió con intentos de Grimaldo.
En la segunda parte, el equipo alemán adelantó líneas y encontró el empate al minuto 82 gracias a un tiro libre impecable de Grimaldo. Sin embargo, el cuadro local reaccionó rápido y, con la participación de Huescas, recuperó la ventaja: el mexicano asistió a Robert, que de cabeza marcó el 2-1, desatando la euforia en el estadio.
El dramatismo llegó en el tiempo añadido. En el minuto 90+1, un centro peligroso terminó en autogol de Hatzidiakos, lo que permitió al Bayer Leverkusen rescatar un empate que parecía inalcanzable.
Con este resultado, el Copenhague se quedó con la sensación de haber dejado escapar un triunfo histórico en su debut en la Champions League, mientras que el Bayer Leverkusen agradeció la fortuna que le permitió evitar una derrota en su estreno europeo