La Selección Mexicana de fútbol enfrenta una situación crítica previo al partido de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Naciones de Concacaf ante Honduras. Tras caer 2-0 en la ida, el equipo dirigido por Jaime Lozano debe remontar en Toluca sin recibir goles para evitar su eliminación, lo que significaría no avanzar al Final Four por primera vez en la historia del torneo.
Además, la eliminación podría complicar su participación en la Copa Oro 2025. Este torneo, el más importante de la región, asigna ocho de sus 16 cupos a los semifinalistas de la Liga de Naciones, mientras que el resto se disputa en repechajes. Si México queda fuera, tendría que buscar su boleto en un exigente repechaje, enfrentándose a equipos como Costa Rica, Jamaica, Guatemala y Trinidad y Tobago.
Esto alteraría su calendario, limitando partidos amistosos ante selecciones de otras confederaciones en Fecha FIFA, cruciales para su preparación rumbo al Mundial 2026. La presión recae sobre el equipo, que no solo se juega su orgullo, sino la estabilidad de su planificación deportiva a nivel internacional.