Los maestros adheridos a la sección 26 del SNTE, lidereada por Juan Bárcenas, fueron obligados asistir y dejar solas las aulas escolares para hacer presencia en las calles de San Luis Potosí a solicitar al gobierno del estado fuerte cantidad de dinero.
De no acudir los maestros a la marcha se tendrían que enfrentar a las represalias sindicales.
Todos los maestros tuvieron que pasar lista con el director de su escuela, y este a su vez avisarle al supervisor que los maestros asistieron a la marcha.
Una organización que no se ve cuando en las escuelas existen maestros con faltas constantes, maestros acusados de violadores y acosadores amparados bajo la tutela del sindicato de la sección 26 del SNTE.
El magisterio está siendo amedrentado por su propio líder sindical para que acuda a manifestarse por causas que solo benefician a la cúpula sindical encabezada por Juan Bárcenas.