Como ya lo hemos mencionado en columnas anteriores, la inteligencia ya no solo se mide en calificaciones escolares, que sepas hacer cuentas sin calculadora o que sepas de memoria la historia de todo el mundo, hay muchas formas de ser inteligente e incluso existen algunos tipos de inteligencia que pueden ser más útiles a la hora de cumplir metas y obtener el éxito.
Definamos que ser una persona exitosa no se refiere a tener una cuenta bancaria enorme, o una vida lujosa, ser exitoso se refiere a que eres una persona capaz de alcanzar las metas que te propones, tienes crecimiento personal, laboral y te sientes bien y satisfecho con tu vida, y claro, para llegar a este punto es necesario tomar las mejores decisiones y hacer algunas cosas.
Tomar decisiones difíciles e importantes, tener la capacidad de controlarte y pensar de manera crítica y centrada, son algunos de los pasos que debemos de dar para alcanzar metas y objetivos, es por esto que es necesario trabajar en los distintos tipos de inteligencia.
La doctora Lissa Rankin escribió en Mind Body Green, que hay cuatro tipos de inteligencia que podrían ser la clave para ser una persona exitosa en todos los sentidos.
La primera es la Inteligencia mental, esta hace referencia a tener un pensamiento racional y crítico, buscando siempre estar informado con datos reales y confiables, cuestionar las cosas que lees y escuchas para encontrar la verdad. Esto puedes conseguirlo a través de la educación, tomando cursos, escuchando expertos, y sobre todo entendiendo que siempre hay espacio para crecer y aprender cosas nuevas.
La Inteligencia emocional, anteriormente hablamos acerca de este tipo de inteligencia ya que es la que nos permite entender y regular nuestras emociones, ser empáticos y tener relaciones de calidad, contrastado en el ámbito laboral esta inteligencia te ayudará a escuchar y entender las necesidades de los demás, brindándote la oportunidad de convertirte en un mejor líder al que quieran seguir, además te da la fortaleza para no destruirte bajo presión. La terapia psicológica ayuda a ejercitar y desarrollar esta inteligencia ya que ayuda a que estes más en contacto con tus emociones, es importante trabajar la escucha activa, la empatía y aprender a tomarnos el tiempo para entender lo que nos tratan de comunicar.
El tercer tipo de inteligencia es la intuitiva, este tipo de inteligencia se refiere a una combinación entre razón e instinto, esta nos ayuda a tomar buenas decisiones y elecciones sin tener más información, entendiendo que es lo que puede pasar y los resultados de lo que digas o hagas. Esta inteligencia se puede ejercitar escuchando y observando los detalles, aprendiendo a confiar en la voz interna, apagando el ruido de las opiniones externas que puedan frenarte. (Como tantos casos de emprendedores que solo ellos confiaban en su proyecto y hoy son imágenes de éxito a nivel mundial).
Y por último la inteligencia somática, este tipo de inteligencia se relaciona a lo corporal, se refiere a tener la capacidad de entender a tu cuerpo y como las cosas que viviste o estas viviendo afectan en ti, entendiendo lo que tu cuerpo quiere comunicarte, hace ya algunas columnas, hablamos acerca de la somatización, y como el cuerpo es tan sabio que comunica aquello que no está del todo bien, reflejando estrés, tristeza, preocupaciones, alegría, etc y no hablamos solo de aspectos profundos como dolores musculares con orígenes psicosomáticos (Es decir que son meramente mentales/ psicológicos), sino también de algunas señales que suelen pasar desapercibidas, como que el corazón se acelere en una situación que te pone nervioso.
Para ejercitar esta inteligencia es necesario prestarle atención a tu cuerpo, reconocer las reacciones y el origen de estas, cuestionarte y aprender a confiar en tu intuición, estar atento a las señales y tener la mente abierta. Ama tu cuerpo, comunícate con él y aprende a escucharle.