Las autoridades chinas han retrasado la autorización para que BYD, el mayor fabricante mundial de vehículos eléctricos, construya una planta en México, según el diario Financial Times. Beijing teme que la tecnología de la empresa termine en manos de Estados Unidos debido a la cercanía entre ambos países.
BYD planeaba producir 150 mil vehículos anuales y generar 10 mil empleos en México, pero el Ministerio de Comercio chino prioriza inversiones en países de su iniciativa de infraestructura, las Nuevas Rutas de la Seda.
El posible regreso de Donald Trump a la Casa Blanca ha enfriado el entusiasmo del gobierno mexicano por el proyecto, ante el riesgo de nuevos aranceles. México ha impuesto medidas contra productos chinos como respuesta a acusaciones de competencia desleal.
La vicepresidenta de BYD, Stella Li, declaró que la empresa sigue evaluando sus opciones. En 2024, BYD vendió más de 40 mil vehículos en México y busca duplicar sus ventas este año.