Si eres de las personas físicas o morales que realizan transferencias entre cuentas bancarias propias evita que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) los considere como ingresos, ya que podrías adquirir problemas fiscales posteriores con Hacienda.
Una consultoría especializada en defensa de riesgos fiscales, precisa que la razón por la cual debes evitar esta práctica se debe a que el SAT puede confundir y considerar las transferencias entre cuentas bancarias propias como un incremento a tus ingresos, ya que no causa impuestos.
¿Por qué no debes hacer transferencias bancarias entre cuentas propias?
Y es que un tribunal federal de justicia administrativa aprobó en 2021 que los contribuyentes tienen la responsabilidad de explicar al SAT que realizó transferencias entre sus cuentas bancarias propias y que no se trata de algún otro depósito que incrementa sus ingresos.
De acuerdo con el artículo 59 fracción III del Código Fiscal de la Federación, el contribuyente en sus estados de cuenta bancarios está obligado a llevar un registro y una contabilidad entre los ingresos que declaras y los depósitos que recibes.
¿Qué documentos debes presentar si haces transferencias entre cuentas bancarias propias?
Para comprobar que son transferencias entre cuentas bancarias propias y no son ingresos acumulables, el contribuyente deberá acreditarlo mediante la siguiente documentación:
Estados de cuentas bancarios
Papel de trabajo
Copia del recibo donde se especifique el monto
Cuenta de donde proviene el depósito
Forma de pago
Número de cheque o reporte de transferencia
Número y nombre de la cuenta bancaria donde se vea la salida del depósito
Origen del importe depositado
Estos documentos son necesarios para demostrar al SAT que dichos depósitos o transferencias entre cuentas bancarias propias provienen de un concepto distinto al determinado por la autoridad fiscal.
Adicionalmente, este despacho sugiere que ofrezcas una “prueba pericial contable”, con el fin de que se pueda verificar el registro de cada operación, la correspondencia de cantidades entre cuentas propias del contribuyente y demostrar que no incrementó su patrimonio.
Al final, lo más recomendable es que tengas un control de tus finanzas, evites los traspasos entre cuentas bancarias propias llevando un orden con tus gastos y presentes en tiempo y forma tu declaración anual.