Si la Fiscalía General de la República lo considera necesario, podría convocar al ex presidente Enrique Peña Nieto para que hable sobre la desaparición de los estudiantes normalistas de Ayotzinapa y sobre la llamada «verdad histórica» que armaron durante su gobierno, así lo aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
No obstante, señaló que la FGR decidió no involucrar al expresidente, ya que existe una declaración del exprocurador General de la República, Jesús Murillo Karam, en la que asume toda la responsabilidad junto con el ex titular de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón.
A pesar de que hay un testimonio de Zerón que indica que la «verdad histórica» se formuló en reuniones en las que participaban Peña Nieto y los secretarios de Gobernación, Defensa Nacional y Marina, López Obrador comentó que sus adversarios sugieren que él protege al licenciado Peña Nieto por el simple hecho de que este tema haya salido a la luz.
«Mis adversarios están buscando pretextos, pero yo no protejo a nadie ni encubro a nadie. No tengo relaciones de complicidad con nadie. Al mismo tiempo, actuamos con apego a la verdad. No vamos a recurrir a chivos expiatorios ni a lo que antes era celebrado por los medios como algo espectacular», aseguró.
López Obrador hizo un llamado a Zerón para que aclare su posición, ya que, según él, Zerón es señalado como el coordinador de quienes torturaron a testigos para que declararan lo que convenía al gobierno de ese entonces. «Si él recibió instrucciones, que las ponga por escrito y las entregue a la autoridad. El que nada debe, nada teme. ¿Por qué, entonces, se fue a Israel a protegerse?», cuestionó.
