En las calles principales y fuera del palacio municipal gritaban «Justicia para Milagros», «No estamos todas, nos falta Milagros», más de cien feministas exigían pronta justicia.
Con dificultad para caminar, sostenido una cartulina, la mamá de Milagros decía «Marcho, porque no sé hasta cuando esté viva».
Ernestina, la madre de Milagros mencionó que no conocía al asesino de su hija, resalta que el sujeto recibió una llamada, señalando que hay alguien detrás de ese lamentablemente acto.