La Audiencia de Barcelona dictaminó este jueves una sentencia que sacudió el mundo deportivo: el exfutbolista brasileño Dani Alves ha sido condenado a cuatro años y medio de prisión por agredir sexualmente a una mujer en un club nocturno de Barcelona.
Alves, quien negó vehementemente los cargos, tiene la oportunidad de apelar la sentencia. Su abogado buscaba su absolución, pero la Audiencia dictaminó en contra. Además de la pena de cárcel, se le impuso cinco años de libertad vigilada y nueve de alejamiento de la víctima, a quien deberá indemnizar con 150.000 euros (aproximadamente US$163.000).
El incidente que llevó a la condena ocurrió en la noche del 31 de diciembre de 2022. La Fiscalía argumentó que Alves y un amigo habían comprado champaña para tres mujeres jóvenes antes de llevar a una de ellas a una zona VIP de la discoteca Sutton. Según la acusación, en ese lugar, Alves forzó a la mujer a tener relaciones sexuales a pesar de sus repetidas peticiones para marcharse.
Alves ha cambiado varias veces su testimonio desde que comenzó el proceso legal. Primero negó conocer a la acusadora, luego admitió haberla encontrado en el baño pero negó cualquier acto de violencia. Finalmente, afirmó que las relaciones sexuales fueron consentidas. Sin embargo, la Audiencia consideró que había suficientes pruebas más allá del testimonio de la demandante que probaban que había sido violada.