La inseguridad en Matehuala es cada día mayor, no se ha logrado poner un alto a los delincuentes, especialmente en el delito de robo; otra víctima de los ladrones fue una vendedora que tenía como fuente de empleo la venta de alimentos afuera del Panteón Guadalupe, para lo cual utilizaba un triciclo donde exponía y cargaba sus productos.
Como de costumbre, la comerciante guardó su triciclo en un área del Panteón, donde hasta hace unos días era un lugar «seguro» al estar en una zona donde se creía, era imposible que entraran los delincuentes.
Fue la mañana del miércoles 8 de junio cuando la comerciante llegó a instalar sus productos a las afueras del panteón pero sorpresivamente el triciclo ya no estaba en el lugar, se dio a la tarea de preguntar si alguien lo había visto pero desafortunadamente las respuestas fueron negativas.
Minutos más tarde, trabajadores del panteón se dieron cuenta que el candado del portón de la parte posterior se encontraba roto, por lo que esta pudo ser la zona por donde entraron los delincuentes a adueñarse del triciclo que es la fuente de trabajo donde se produce el único ingreso de la trabajadora.
