Muy bonita la fiesta de San Francisco de Asís en Real de Catorce, sigue la tradición, pero desafortunadamente también sigue el maltrato animal con las jornadas intensas que tienen que cumplir los caballos para atravesar el Túnel Ogarrio cargando cientos de personas.
En El Real es una costumbre, en fechas de fiesta, atravesar la entrada en carretones jalados por caballos, es bonita la experiencia, pero los equinos hacen la misma práctica durante todo el día, por al menos dos semanas, sin importar a las autoridades el exceso de trabajo al que son sometidos.
Los caballos son obligados a cargar con cerca de una tonelada por cada viaje, la mayoría de estos animales reflejan cansancio profundo pero no existe persona alguna que impida el abuso que sufren además, por el fuerte sol que reciben mientras están a la espera de llenar el carretón para un nuevo viaje.
Muy poco se ve que los caballos reciban alimento y agua para soportar la travesía de hacer posible las experiencias que viven los turistas en su llegada a visitar a San Francisco de Asís. Esta película se vive cada año y las autoridades han solapado que se atente contra el bienestar de los caballos