Asegurados al IMSS con la enfermedad crónica de la diabetis se han visto en serios problemas al no contar en el Seguro Social el medicamento que se requiere para su tratamiento, lo cual en muchas de las ocasiones el asegurado lo tiene que adquirir en farmacias particulares e implica un desembolso económico grande que no cubre el IMSS y en el peor de los casos, los enfermos se quedan sin que se le aplique el medicamento hasta que llegue a la farmacia del Seguro.
Las quejas son constantes, pero no hay quien atienda la demanda en el IMSS y los asegurados se muestran inconformes pues no les surten la insulina de acción rápida. La mayoría de las personas con diabetes tipo 2 comienza su tratamiento con metformina, la cual en muchas ocasiones escasea y se dificulta para los asegurados seguir el tratamiento ante la falta de medicamento en la farmacia del Seguro Social.
Nadie da una explicación a esta falta de medicamentos, la dirección del IMSS no se ha manifestado al respecto, pero las quejas siguen en aumento y la desesperación de los derechohabientes que padecen este mal se hace cada día más grande al igual que su enfermedad.