El director de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento de Matehuala (SAPSAM), Juan Carlos Pérez Mendoza, quiso agandallarse al Ayuntamiento y presentó un decreto ante el Congreso del Estado, en complicidad con algunos integrantes de la Junta de Gobierno y del Consejo Consultivo, para eternizarse en el control del manejo del organismo del agua, subir las tarifas y hacer negocios a contentillo, pero el poder legislativo le dio palo y lo mandó a cuadrarse con los integrantes del Cabildo quienes le propinaron un jalón de orejas demoledor.
Así disciplinaron a Juan Carlos Pérez en el Cabildo:
Juan Carlos Pérez Mendoza, titular de SAPSAM, presentó ante el Cabildo de Matehuala la propuesta de modificación al decreto que rige el funcionamiento del Organismo.
Entre los cambios que pretende, está: ser un organismo con autonomía financiera para gestionar y ejecutar recursos federales a fin de supuestamente implementar proyectos propios que no dependan de ningún gobierno.
La propuesta fue presentada al cabildo de Matehuala tras ser desechada por el Congreso del Estado. Juan Carlos Pérez se brincó la autoridad del Ayuntamiento con la intención de que los legisladores avalaran el documento que a todas luces es tendencioso a su favor.
En la sesión de Cabildo, el día 30 de julio, los regidores de Matehuala, analizaron, en presencia de Juan Carlos el documento al que le fueron detectados varios puntos que favorecen directamente al titular de Sapsam.
Uno de los cambios que pretende es que el cargo de director del Organismo dure 9 años. De acuerdo al documento, el titular deberá ser nombrado al quedar autorizada la propuesta por el cabildo, es decir, sin dar tiempo a presentar propuestas para el cargo, lo que indica que su intención es empezar con esta nueva ley un nuevo periodo al frente de Sapsam.
El documento establece que las decisiones que se tomen serán autorizadas por el Consejo Consultivo y de esta manera, Pérez Mendoza, pretende quitar facultades al Ayuntamiento y a su vez evitar que las propuestas del organismo se presenten ante el cabildo para ser él quien haga y deshaga.
Por otra parte, Juan Carlos tiene intención de que se aumente la tarifa de agua para crear un fondo de pensiones que le asegure su futuro económico de por vida. Supuestamente, de este incremento saldrán proyectos de mejora para el servicio de agua potable, pero en su historial no existen proyectos de infraestructura hidráulica; las más grandes obras que ha hecho es la construcción de nuevas oficinas.
Otra de las observaciones que le hicieron y no que sembró duda es que la propuesta no estaba firmada por toda la Junta de Gobierno sino por integrantes del Consejo Consultivo que no están facultados para autorizar una propuesta de reforma de esta magnitud.
Juan Carlos se fue con la cola entre las patas al no tener el aval de los regidores. La propuesta será analizada por el área jurídica del Ayuntamiento.