En un acto de evidente ironía, un grupo de jóvenes ha decidido poner a prueba la funcionalidad de las rampas para personas con discapacidad recientemente instaladas en calles de Cedral, cuya pavimentación ha sido fuertemente promovida por la alcaldesa Cinthia Segovia.
Las imágenes difundidas en redes sociales muestran a los jóvenes sorteando con dificultad los obstáculos presentes en estas rampas, diseñadas supuestamente para facilitar el tránsito de personas en sillas de ruedas y con movilidad reducida.
Una de las principales críticas a esta obra pública radica en la aparente falta de planeación. Las rampas, en lugar de ser un acceso seguro y cómodo, se encuentran ubicadas justo al lado de postes de luz, lo que dificulta considerablemente el paso de quienes utilizan sillas de ruedas. Además, la altura de uno de los extremos de las rampas las convierte en un obstáculo para este sector de la población.
Estos hechos han generado un intenso debate en la comunidad, que cuestiona la calidad y la utilidad de las obras realizadas por el Ayuntamiento. Ciudadanos han expresado su preocupación por la falta de accesibilidad y han exigido una revisión exhaustiva de los proyectos de infraestructura urbana.
Resulta urgente que las autoridades municipales tomen cartas en el asunto y realicen las modificaciones necesarias para garantizar que las rampas cumplan con su función y sean verdaderamente accesibles para todas las personas, que se priorice la inclusión y se diseñen espacios públicos que permitan a todos los ciudadanos transitar con seguridad.