A pesar de la reciente rehabilitación de la calle Jaime Nunó, llevada a cabo por el gobierno municipal de Raúl Ortega, vecinos de la zona han denunciado una serie de inconvenientes que dificultan su vida diaria. Uno de los principales problemas señalados es la imposibilidad de acceder a sus cocheras debido a las nuevas condiciones de la vía.
Los residentes afectados comentan que las modificaciones realizadas tras la obra han dejado sus cocheras prácticamente inutilizables. Las banquetas, en algunos casos, han sido construidas a una altura que impide el ingreso de sus vehículos, obligándolos a realizar maniobras complicadas y arriesgadas.
Otro aspecto que ha generado molestia entre los vecinos es la presencia de rampas para personas con discapacidad. Si bien, estas fueron instaladas, su diseño actual dificulta el tránsito y el cruce de la calle para quienes requieren de ellas. Los usuarios de sillas de ruedas y otros dispositivos de movilidad asistida han manifestado que las rampas los obligan a realizar múltiples maniobras, exponiéndolos a riesgos al momento de cruzar la calle.
Una situación más que abona a la mala rehabilitación es que, en las esquinas, las rampas no tienen bajada a ras de piso, por lo que es complicado o imposible bajar y subir en silla de ruedas; un total descuido u omisión en la rehabilitación, pues las maniobras que tienen que hacer se convierten en una trampa con el riesgo de ser arrollados mientras intentan pasar a la otra acera.
Vecinos de la calle Jaime Nunó demandan una pronta solución Solicitan que se revisen los diseños de las banquetas y rampas para garantizar que no obstaculicen el acceso a las propiedades y que sean seguras para todas las personas.