El festejo de la Navidad y del Año Nuevo, son motivo de recuerdos y pláticas que parecen interminables entre las familias y amistades, en ellas no pueden faltar los deliciosos tamales, el alimento preferido por los cedralenses en esta época decembrina.
Con grandes historias en la gastronomía de Cedral, los tamales se colocan entre los preferidos en este municipio para celebrar la Nochebuena y para despedir el año.
Varias generaciones han heredado la costumbre y el sazón de las mujeres que hace algunos ayeres eran apasionadas por este arte de hacer tamales.
En Cedral no pueden faltar los tamales. Una gran cantidad de personas se dedican a deleitar a familiares y amigos que acuden a las tradicionales posadas.
El olor envuelve a todo el municipio y aunque se preparan en varios hogares, es común que se repartan a los conocidos, no importa que también haya cenado este manjar, el ambiente de amabilidad y respeto predomina entre las cocineras.
Como si de un intercambio de tamales se tratara, los itacates y las reliquias se distribuyen entre todos, si bien, se trata del mismo platillo, lo cierto es que cada uno tiene diferente sabor y todos son altamente disfrutables.