José Loera
DE LA DESESPERACIÓN de los derechohabientes del IMSS que tienen la necesidad de acudir a una cita médica a San Luis Potosí o a Monterrey, en la ventanilla de tramites de ese departamento se encuentran con la novedad de que no hay dinero, el paciente tiene de dos sopas: Posponer la cita hasta que haya recurso o irse por sus propios medios, en ambos casos la sopa se atraganta, en la primera, la enfermedad no se detiene, en la salud, el tiempo es importante para combatir el mal, el tiempo ha sido factor importante en muchas de las negligencias médicas, donde los enfermos han perdidos un miembro de su cuerpo o hasta la vida, en la otra sopa, la de “irse por sus propios medios”, el paciente tendrá que desembolsar gastos que no tiene contemplado y la mayoría de las veces no se les hace la remuneración, pues para seguir poniendo en alto la burocracia que priva en el Instituto Mexicano del Seguro Social, hay que hacer un riguroso protocolo de comprobación de gastos y no todos están contemplados para su pago al derechohabiente.
DE NUESTRO SISTEMA de salud esta más enfermo que un paciente desahuciado, en tiempos de pandemia se suspendieron toda clase de citas médicas, pacientes con enfermedades crónicas, muchos de ellos ya no regresaron a cita mensual, fueron muchos los que le rindieron cuentas al creador e ingresaron a las estadísticas de los fallecidos por COVID 19, personas que entraron al tratamiento a las salas de hospitalización y fue lo último que hicieron, en la soledad de una cama de hospital terminaron sus días alrededor de más pacientes que sufrieron las mismas consecuencias, lo dicho por las autoridades de salud es una verborrea comparado con los testimonios de los familiares que tuvieron la desgracia de perder un ser querido bajo la ola de muerte que dejó el COVID-19.
AUN Y CUANDO la Organización Mundial de la Salud ha declarado el fin de la pandemia, para los tres ordenes de gobierno el tema de salud esta solo en acciones mediáticas que no se reflejan en la atención de los enfermos, hospitales que no cuentan con medicamentos, falta de personal y de médicos, la ausencia de especialistas y equipo médico, no hay ni para hacer una diálisis, se requiere acudir a sitios particulares y si se trata de algún examen de laboratorio estos brillan por su ausencia al igual que los Rayos X, así de mal esta nuestro sistema de salud, algo que debería de ser considerado de situación primordial, es lo ultimo en lo que piensa nuestros funcionarios.
PARA REMATAR, por medio de marcha simultaneas en la capital potosina, Ciudad Valles, Ríoverde y Tamazunchale enfermeras de profesión exigen un salario digno, piden que no sean engañadas y exista transparencia en su traslado al nuevo esquema llamado IMSS-BIENESTAR, piden se les reconozca su profesión y no caer en los tabuladores implementados por el IMSS hace mas de 50 años, petición justa, y uno de los factores principales para mejorar el sistema de salud: Pago digno a los trabajadores del sistema, pero a todos, no solo a los funcionarios de oficina llamados directores.
Los tiempos de DIOS son perfectos, si DIOS quiere nos leemos mañana
