Parece broma pero no lo es, al Servicio de Administración Tributaria (SAT) absolutamente nadie se le escapa, a partir de ahora trabajos de hechiceros o vudús, curanderos, chamanes, deberán facturar y con ello estarán obligados pagar impuestos.
La dependencia quien es la autoridad fiscal en el país causó revuelo al incluir en su Catálogo de productos y servicios sujetos a impuestos y los cuales son deducibles de este gravamen, debido a que cuentan con un código para facturar, a los trabajos denominados “con energía”
Ahora forman parte del rubro de la salud, específicamente en el apartado de “Curanderos”, son considerados como medicina alternativa y holística, además se registró con un código a las prácticas herbales, curas con algas marinas y hasta con aguas termales.
Pero cual es significado del hecho, quienes realicen estas prácticas deberán cumplir con sus obligaciones fiscales a fin de que sus comercios se encuentren debidamente registrados y aporten el pago de impuestos.
Las personas que acudan a recibir dichos servicios pueden deducirlos de impuestos con la clave registrada en el SAT.
