Activista, abogada y maestra en Derechos Humanos, Berenice Castillo Cortés, tiene discapacidad visual desde los diez años de edad, ha vivido en un mundo de sombras; este hecho doloroso e incapacitante, no la limitó ni doblegó para estudiar y sobresalir, incluso, fue en la preparatoria donde experimento en carne propia discriminación por ser mujer y discapacitada
Nació en la agreste región Altiplano,en la comunidad de Laguna Seca, municipio de Charcas, el 13 de noviembre de 1985; previo a recibir el prestigiado reconocimiento “Matilde Cabrera Ipiña de Corsi. Año 2025”, otorgado por el Congreso del Estado narró: “pensé que tener una discapacidad me iba a convertir en una persona inútil, pero al transcurso de los años me he dado cuenta que muchas personas luchan todos los días igual que yo por visibilizar a las personas con discapacidad y promover sus derechos humanos”.
Cuenta que tras terminar su rehabilitación en el DIF Estatal, cursó la secundaria abierta en el Instituto de Educación para los Adultos y la preparatoria en un sistema
regular donde pude, dijo, experimentar en carne propia la discriminación por género y discapacidad, la violación a los
derechos humanos, así como la falta de conciencia y cultura que vivíamos (y continuamos viviendo) en los centros
educativos.
Este hecho la llevó a tomar las más grandes decisiones de su vida, estudiar la
licenciatura en derecho, porque esta carrera podría brindar las herramientas necesarias “para defenderme a mí
misma”, puntualiza.
“Bere”, cuenta con un vasto currículum; actualmente labora en el Centro de Justicia para Mujeres, se distingue por impartir pláticas de sensibilización en materia de empoderamiento de las mujeres, violencias contra las mujeres con discapacidad, asi como sobre la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, en el año 2004 fundó la asociación civil “Trabajemos por una nueva luz”.
A la galardonada no la frenan las complicadas y viejas escaleras de edificios o la falta de señalética adecuada para acudir a impartir sus pláticas, camina por las calles solo auxiliada por su bastón; quienes la conocen disfrutan de su buen humor, irradia fortaleza y seguridad, pero, ¿Qué es tener una discapacidad visual? Se define como una condición que afecta directamente la percepción de imágenes en forma total o parcial. Lo principal es que ni aun de cerca se reconocen los rostros de las personas que los rodean, además, se dificulta el desplazamiento, pueden sufrir tropiezos. Es decir, lo que “Bere”, ha logrado le ha costado el triple.
Ataviada con un saco blanco que destacaban aún más su cabello de fuego, un moderno y nuevo look, recibió el premio que el Poder Legislativo otorga en memoria de quien fue la primer regidora en San Luis Potosí y la primer diputada local; la impulsó su amor a su tierra y dejó un legado de equidad, “Matilde Cabrera Ipiña de Corsi. Año 2025”.