El sistema del servicio médico de San Luis Potosí, se sabe, está por los suelos. El Colegio de la Profesión Médica se indigna por el nombramiento de la nueva titular de Salud, Leticia Mariana Gómez Ordaz, pero defiende lo indefendible: La negligencia del personal de salud.
El hecho de no tener insumos en hospitales, de fallar en un diagnóstico, de retrasar atención por falta de especialistas implica que se cayó en negligencia médica. Esto podría no estar en sus manos, pero es prudente abordar el tema porque alegan que se necesita a un titular de los Servicios de Salud capacitado cuando, ante quejas realizadas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos de San Luis Potosí, protegen a la pésima atención, quizá por intereses propios o compadrazgos.
Para entender el contexto, explico: Después de un año y medio de que una familia puso una queja hacia los hospitales Central y de Soledad, por negligencia en los casos que se mencionan arriba, el Colegio de La Profesión Médica asumió estos comportamientos como «normales» dentro del servicio médico de San Luis Potosí.
El diagnóstico de «miomas» a una paciente, en el Hospital Central (Problema que, supuestamente, acabaría con una operación) y una posterior mala atención la llevó a acudir al Hospital de Soledad en donde le hicieron estudios de cáncer, los cuales salieron positivos. Esto, señores, ¿No es negligencia por un diagnóstico erróneo?
En ese Hospital, no tenían: Especialistas ni insumos para iniciar con la atención requerida. Entre los dos hospitales se echaron la pelotita y finalmente en Soledad se deslindaron con un traslado al Hospital Central, en donde ¿Qué cree estimado lector? tampoco había especialistas ni insumos.
Lugo de varios días recibió la atención de un doctor que nunca quiso recibir a la familia. El retraso provocó que la víctima no recibiera las quimioterapias y, no es difícil saber en qué acabó la situación, ¡Pues sí! en la muerte de la paciente.
De acuerdo a licenciados de la CEDH y a la propia Primera Visitadora de la Comisión, Laura Aguilar, el Colegio de la Profesión Médica debía evaluar el caso y responder en un máximo de 10 días si es que hubo negligencia. Los diez días se volvieron meses y tras revisar el expediente 1VQU-0123-2023, la CEDH, emite el oficio a la familia afectada, donde exponen que:
«Tras un análisis técnico de los expedientes clínicos, por parte profesionales médicos, en los distintos nosocomios consideraron que la secuencia de manejo a la paciente fue el adecuado».
Queda la duda si en la investigación que realizaron, les fueron presentados los documentos reales o si el Colegio de la Profesión Médica la hace de tapadera. Por cualquier cosa, anexamos parte de los documentos que se encuentran en poder de este medio «El Tiempo del Altiplano» y que fungen como prueba del diagnóstico erróneo y de la falta de insumos que los hospitales aceptan.
