La Delegación de la Fiscalía General del Estado (FGE) en Matehuala, encabezada por Pedro Martínez Perales, continúa en el centro de críticas debido a señalamientos por deficiencias en la atención ciudadana y en el manejo de denuncias, de acuerdo con información reciente emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH). Las fallas señaladas apuntan a un servicio limitado y poco eficiente para quienes buscan acceso a la justicia en la zona Altiplano.
Según los datos de la CEDH, durante el mes de octubre la Delegación Segunda de la FGE acumuló tres quejas formales, todas vinculadas a retrasos injustificados en la integración de carpetas de investigación. Esta situación prolonga los procesos judiciales, afecta directamente a las víctimas y les niega el derecho a una atención pronta y adecuada, como lo establece la normatividad vigente.
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A las quejas oficiales se suman múltiples testimonios ciudadanos que describen al delegado Pedro Martínez Perales como un obstáculo para quienes intentan presentar una denuncia. Vecinos y víctimas aseguran que el proceso se ha vuelto «engorroso» debido a la presunta indiferencia del funcionario, especialmente en casos que involucran a mujeres y menores de edad, quienes requieren una atención sensible, oportuna y especializada.
Las denuncias también destacan la falta de compromiso de la Delegación, señalando que el delegado mantiene un trato inhumano hacia las familias que acuden en busca de apoyo. Afirman que “poco le importa el dolor que sufren las víctimas” y que, además, casi nunca se encuentra en su oficina, lo que retrasa aún más la atención y genera mayor frustración entre la población afectada.
Ante la recurrencia de estos señalamientos, ciudadanos y víctimas exigen la intervención de las autoridades superiores de la Fiscalía General del Estado para corregir las irregularidades y garantizar un servicio digno, eficiente y responsable a quienes buscan justicia en Matehuala y la región Altiplano.
