Automovilistas y habitantes de la región han denunciado las precarias condiciones de la carretera Cedral–Vanegas, donde la presencia de baches y la falta de alumbrado público se han convertido en factores de alto riesgo. El tramo previo al ingreso a San Juan de Vanegas es señalado como el más afectado, pues el deterioro de la carpeta asfáltica obliga a los conductores a reducir drásticamente la velocidad o realizar maniobras evasivas, incrementando la posibilidad de accidentes, principalmente durante la noche.
A esta problemática se suma la poca o nula iluminación a lo largo de la vialidad, lo que dificulta la visibilidad tanto para automovilistas como motociclistas y peatones. Usuarios han coincidido en que transitar por esta ruta representa una amenaza constante, cuya combinación de baches y oscuridad genera preocupación entre quienes dependen diariamente de esta conexión carretera.
Otro factor que incrementa el riesgo es la presencia recurrente de ganado suelto, principalmente vacas, chivas y caballos, cerca del entronque hacia Real de Catorce. Los animales invaden el asfalto de manera repentina, especialmente en horarios nocturnos, provocando situaciones de peligro para los viajeros. Conductores han reportado que el riesgo de un percance es elevado y que la situación ha sido denunciada en múltiples ocasiones sin una solución definitiva.
Ante este panorama, el alcalde de Vanegas, Gerónimo García Ruiz, informó que para el ejercicio 2026 se tiene proyectada la ampliación de la carretera número 62 que conecta con Cedral. El proyecto, actualmente en elaboración a través del ramo 33, será presentado antes de finalizar el año a autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en sus niveles estatal y federal. La obra contempla un total de 25 kilómetros, desde la comunidad El Pequeño hasta Vanegas, y buscará el apoyo del Gobierno del Estado y la empresa Proteína Animal (PROAN). De aprobarse, permitiría reducir accidentes, agilizar los traslados y beneficiar a miles de usuarios que se dirigen hacia Catorce y San Tiburcio, Zacatecas.





