El Congreso del Estado de San Luis Potosí aprobó una serie de modificaciones a las leyes de ingresos municipales que implican un incremento en diversos impuestos. Entre los más destacados se encuentran el predial, las tarifas del agua y el impuesto a las bebidas alcohólicas. La decisión ha generado diversas reacciones entre la ciudadanía y los sectores productivos.
Mientras algunos argumentan que estos aumentos son necesarios para generar mayores recursos y mejorar los servicios públicos, otros consideran que representan una carga adicional para la economía familiar y empresarial. Según las autoridades, estos aumentos se justifican por la necesidad de incrementar los ingresos públicos para hacer frente a los desafíos económicos actuales y financiar proyectos de inversión en infraestructura y servicios básicos.
Además, se argumenta que el ajuste en las tarifas del agua es necesario para garantizar el trabajo de los organismos operadores y mejorar la calidad del servicio. Los incrementos en el predial y las tarifas del agua tendrán un impacto directo en el bolsillo de los ciudadanos, especialmente en aquellos con menores ingresos. Por otro lado, el aumento en el impuesto a las bebidas alcohólicas podría repercutir en el precio final de estos productos y afectar a los establecimientos dedicados a su venta y consumo.