El «Rich» es un monumento a la corrupción, así lo expresó Ramón Infante padre de Manuelito, una de las víctimas de la tragedia registrada del viernes en la capital potosina.
Hoy decenas de personas acompañaron a las familias de las víctimas con una oración, una flor, una palabra de consuelo, ahí en el sitio donde perdieran la vida dos jóvenes potosinos.
«Que esto no se vuelva a repetir, hay muchos involucrados y demasiada omisión, necesitamos que deje de haber simulación y que nuestros hijos, así con la seguridad con la que salen de casa regresen a ella, y no haya lugares donde tienen una verdadera emboscada. Que esto sirva para replantear todos los protocolos que pueda haber en un futuro, para que haya lugares seguros a los que asistir y no lugares de corrupción donde existe la ambición, que operan sin permisos y clandestinamente, aunque estén en lugares VIP».
Como sociedad se debe exigir a los tres niveles de gobierno que apliquen sanciones, que se investiguen porque si tenían permiso de vinos y licores, expedido en abril de este año a nombre de Nancy N, en una plaza que rentan locales para restaurantes pero que convierten en antros a ojos de todos.
Acompañado de decenas de personas Ramón Infante pidió respeto y solidaridad, ante estos momentos donde las familias de Manuel y Rodrigo buscan consuelo y al mismo tiempo exigen justicia. Para las familias de los jóvenes heridos que siguen luchando por su vida, pidió respeto y oraciones por su recuperación.
Su llamado fue claro y contundente, no dejo huecos en la exigencia de vigilar y hacer cumplir la ley desde la Secretaria de Gobernación hasta la Dirección de Comercio Municipal, esperando que esto marque un precedente para que en el futuro estos espacios operan con todos los protocolos y normativas, que tengan la seguridad los padres de familia que sus hijos van a lugares que están «bien», y aunque esta consciente de que esto no le devolverá a su hijo si ayudará a evitar más tragedias que enluten otros hogares, «que sea el inicio de un nuevo San Luis Potosí…».