Los productores de jitomate del Altiplano Potosino y propietarios de invernaderos se encuentran preocupados y enfrentan serias dificultades tras la decisión del gobierno de Estados Unidos de imponer un arancel del 17.9 % a las exportaciones de este producto, medida que entrará en vigor a partir del próximo 1 de agosto. Ante esta situación, los agricultores han mantenido comunicación constante con la Secretaría de Economía del Gobierno Federal, con el objetivo de revisar el impacto de estos nuevos gravámenes y buscar una negociación con la Unión Americana que permita mitigar las afectaciones al sector.
Los productores reconocen que la Secretaría de Economía ha brindado apoyo y acompañamiento en el ámbito federal; sin embargo, lamentaron que, al tratarse de decisiones unilaterales por parte de Estados Unidos, las posibilidades de revertir estos aranceles de manera inmediata son limitadas. Exportadores locales advierten que la aplicación de este nuevo impuesto afectará la competitividad del jitomate mexicano en el mercado norteamericano, además de poner en riesgo miles de empleos directos e indirectos generados por la cadena productiva y comercialización de este cultivo.
