El Jueves Santo se conmemora la Institución de la Eucaristía en la celebración de los Santos Oficios. Más tarde, en la denominada hora santa, se rememora la agonía y oración de Jesús en el huerto de los olivos, la traición de Judas y el prendimiento de Jesús.
La Semana Santa de 2022 comenzó formalmente el 10 de abril, conocido como el Domingo de Ramos y termina el 17 del mismo mes en la llamada Pascua, día de la resurrección de Jesús.
El Jueves Santo es uno de los días más importantes de la semana, pues comienza el Triduo Pascual, lo que significa el periodo en que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesús.
En el Jueves Santo por la mañana, aún siendo Cuaresma, se oficia la llamada «Misa Crismal», que es presidida por el obispo diocesano y concelebrada por su presbiterio. En ella se consagra el Santo Crisma y se bendicen los demás óleos, que se emplearán en la administración de los principales sacramentos. Junto a ello, los sacerdotes renuevan sus promesas realizadas el día de su ordenación. Es una manifestación de la comunión existente entre el obispo y sus presbíteros en el sacerdocio y ministerio de Cristo. Es recomendable litúrgicamente, y es de práctica común celebrarla en la catedral.
En algunos lugares, existe la tradición de visitar siete monumentos en distintos Templos de una misma ciudad, para recordar a modo de «estaciones», los distintos momentos de la agonía de Jesús en el Huerto y su posterior arresto.
Desde hace unos años, la Iglesia Católica celebra el Jueves Santo, el llamado Día del Amor Fraterno.
La historia nos dice que el Jueves Santo Jesús cenó la Pascua con sus apóstoles o discípulos, siguiendo la tradición judía, ya que según esta se debía cenar un cordero puro y del año; con la sangre de este se debía rociar la puerta en señal de purificación, puesto que si no se hacía así, el ángel exterminador entraría en la casa y mataría al primogénito de esa familia (décima plaga), según lo relatado en el libro del Éxodo.
La fecha del Jueves Santo en el calendario que varía cada año para buscar la coincidencia de la Semana Santa con la primera luna llena posterior al equinoccio de primavera en el hemisferio norte (equinoccio de otoño en el sur).