TitularesVida y Entretenimiento

Meditar aporta efectos positivos al cuerpo y mente

La meditación se ha convertido en una práctica recurrente, no sólo como tendencia, sino por sus efectos positivos en la salud, de acuerdo con diferentes estudios. Si eres principiante y te preguntas qué necesitas para comenzar a meditar y disfrutar de sus beneficios, “Mar del Cerro.com” da 5 consejos para que inicies en este camino:

1) Intención. La intención es de las cosas más importantes porque te guiará y motivará en todo tu camino. No te preocupes si no lo tienes claro en un principio, tu intención puede cambiar. Por ejemplo, puedes empezar a meditar porque no estás durmiendo como antes y quieres descansar mejor. Ya que lo logras, tu intención cambia y, ahora, puedes meditar para sentirte más relajado y quieres estar más presente con tu familia.

2) Espacio en tu agenda. Aparta 10 minutos al día para meditar. Puede ser al despertar, antes de levantarte de tu cama, en cuanto se van tus niños a la escuela, después de desayunar o antes de dormir. La idea es que el horario te acomode y se adapte a ti. Lo recomendable es que lo agendes, de esta manera tendrás esos 10 minutos apartados y será más probable que practiques.

3) Audio o Guía. Puedes acompañar tu meditación con una playlist musical o alguna guía que te guste y te acomode. Es importante que comiences con meditación guiada, ya que te da un punto donde poner tu atención y tu mente no divaga tanto. Poco a poco podrás irte al silencio y llevar tú solo tu práctica.

4) Alarma o cronómetro. Si vas a meditar 10 minutos, pon una alarma a los 12 o 15 minutos. Esto te ayudará a saber que no te vas a pasar o que si te quedas dormido despertarás y no se te hará tarde. Recuerda que dormir no está mal, quiere decir simplemente que te estás relajando de más y te falta concentración, eso solo se consigue con la práctica. Sigue meditando, pon tu alarma y lo lograrás en menos de lo que crees.

5) Paciencia, curiosidad y mucho amor. No seas tan estricto contigo mismo y trates de evaluar tu desempeño. Por el contrario, suelta la necesidad de hacerlo perfecto, date cuenta que los pensamientos que te distraen son únicos y dicen mucho de ti. No te enojes contigo por “no lograrlo”. Observa qué es lo que te llama la atención, qué te saca de la concentración y encontrarás cosas increíbles de tu persona.