La Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de San Luis Potosí (SEGE) ha intensificado su supervisión sobre instituciones educativas de nivel superior que operan sin cumplir con los requisitos oficiales. Actualmente, se tienen abiertos cerca de 18 procesos de revisión contra planteles que no han mantenido su documentación al día o que presentan irregularidades administrativas.
Estas visitas de inspección buscan verificar que las universidades cumplan con la normatividad vigente. En caso de encontrar deficiencias, las autoridades educativas otorgan un plazo para regularizar su situación antes de proceder con sanciones. En particular, se ha detectado la operación de escuelas denominadas “patito”, es decir, instituciones que no cuentan con registro oficial y que podrían estar entregando títulos sin validez, afectando así a los estudiantes.
La mayoría de los casos se concentran en la capital del estado, donde se localiza más del 60% de la oferta educativa, aunque también se han detectado situaciones similares en otras regiones como el Altiplano y la Huasteca.
Uno de los casos más recientes es el de la Universidad de Matehuala, donde la autoridad ya sostuvo reuniones con sus directivos para buscar una solución. La Secretaría aclaró que, cuando se detecta una irregularidad grave, se impide la inscripción de nuevos estudiantes, aunque los alumnos que ya están en curso no se ven afectados y se les garantiza su derecho a concluir el ciclo escolar con respaldo en la legalidad.