Ser policía no se trata de ser hombre o de ser mujeres, se trata de ser humanos y de hacer bien las cosas; sentencia Alba Luz Juárez Hernández, directora general de la Academia de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado de San Luis Potosí quien, al ser la primera mujer en asumir este cargo, reitera la necesidad de que se rompan los clichés, los estereotipos y los prejuicios que, durante años, imperaron en la corporación que, ahora, se sustituyen con educación, valores y un amplio sentido de humanidad, vocación y servicio.
La responsable de la formación de los nuevos agentes de la Guardia Civil Estatal reitera que, lejos de abonar a la división con ideas arcaicas, se busca crear en los jóvenes una cultura de respeto, del buen trato y de la profesionalización a fin de que, una vez que se desempeñen como elemento activos, puedan proporcionar el servicio que la sociedad potosina espera de sus policías.
«Estoy convencida de que la educación es el arma más poderosa para cambiar al mundo, como diría el ganador del Premio Nobel (Nelson Mandela), y esas palabras han hecho mucho eco en mí. Se trata de ver cómo queremos hacer las cosas, de cómo lo aplicamos aquí (en la Academia) y de cómo lo queremos ver allá, afuera» reitera Juárez Hernández insistir en que, además de la formación que reciben para desempeñarse como agentes, también se les inculcan valores para vivir en sociedad, para ser mejores personas y abonar al desarrollo de su entorno.
De igual manera y con la intención de que se deje de lado la idea de que una corporación policiaca no es espacio para mujeres, reitera que se ha trabajado en la captación y el empoderamiento de las jóvenes potosinas, tanto que, para la Tercera Generación, se tuvo un ingreso cercano al 40 por ciento, lo que representa poco más de 120 mujeres que buscan sumarse a las labores de seguridad y protección de San Luis Potosí.
«Llegamos en el momento justo para implementar una nueva forma de trabajar e incorporar el respeto a los derechos humanos, el respeto a la dignidad humana. Esos son nuestros valores esenciales […] Haber recobrado la felicidad y el orgullo de ser guardia civil es con lo que me quedo, es lo que me llevo. Es lo que hemos logrado»
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