En la neogótica Catedral de Matehuala se vivió el Jueves Santo, inicio del Triduo Pascual lo más importante de la Semana Santa, que conmemora la Pasión, Muerte y Resurrección de nuestro Señor.
Encabezado por el Obispo de la Diócesis de Matehuala, Monseñor Margarito Salazar Càrdenas, se llevó a cabo el Lavatorio de pies, donde con suma humildad, lavó los pies de 12 personas haciendo alusion a los 12 apóstoles en la Última Cena.
En esta ceremonia recordamos el mandamiento de Jesucristo que reza: «Os doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros: para que, así como Yo os he amado, vosotros también os améis unos a otros» (Jn 13, 35).
En este Jueves Santo se recuerda el
amor incondicional de Cristo, quien lavó los pies de sus discípulos como ejemplo de humildad y servicio.
Se distingue también por la Visita a las 7 iglesias donde con devoción se realiza para acompañar a Jesús, aludiendo a la noche que fue apresado.
En cada Iglesia se agradece a Jesucristo por la Eucaristía y el sacerdocio, y se le acompaña en sus sufrimientos desde el Huerto de Getsemaní hasta su sepultura.










