DE LA INTENCION que ha manifestado el presidente Iván Estrada de su reelección a la silla presidencial de Matehuala, lo hace en un momento donde su estructura política no cuenta con un plan B, Iván Estrada ha estado todo el tiempo en los reflectores municipales y no permite que ningún otro funcionario este por encima y cuando se trata de dar cualquier información va por delante el nombre del actual presidente. Sin contar con relevos generacionales a su lado, pues es casi un hecho, que al terminar la administración para la mayoría de sus allegados también se habrá terminado su carrera política, pues con un Partido Acción Nacional dividido en torno a la figura de Iván Estrada, con varios personajes del panismo de alcurnia no muy contentos con el actuar del presidente, quien ha olvidado por completo sus raíces políticas y se ha entregado a sus allegados priistas, los cuales lo halagan como el espejo de la bruja de Blanca Nieves, para el 2024, Iván ya no tendrá su padrino de CONAZA, tampoco tendrá la estructura que en su momento le proporciono el entonces primer priista del estado Juan Manuel Carreras y el actual diputado Alejandro Leal, en ese tiempo secretario de gobierno.
AHORA SE VIVEN otros tiempos, este momento se encuentra desboronado el que pudiera ser su equipo político y en cual se fracturo con la remoción del tesorero municipal Diego Alejandro Mendoza, el alejamiento que tiene con el titular del Ramo 33, Miguel Ledesma Careaga, el poco acercamiento con la sección sindical de los trabajadores del ayuntamiento, el descontento que enfrentará ante las familias de los trabajadores que despidió en su llegada a la administración tan solo por ser verdes, son causales que le habrán de cobrar factura en el 2024, sin contar lo que se predice en las cuentas publica con excesivos gastos que no han sido posible que se informe con exactitud en que se gastó el dinero del pueblo, y que para esta ocasión tendrá que enfrentar en el Congreso con muy pocos aliados de su parte. Así bajo ese panorama, Iván Estrada pretende volver a ser el candidato de la alianza Va Por México, alianza formada por el PAN, PRI, PRD y de la cual no se la auguran grandes éxitos cuando sus lideres nacionales, especialmente el del PRI están en la cuerda floja.
Los tiempos de DIOS son perfectos, si DIOS quiere nos leemos mañana
