El pasado sábado 16 de marzo, los reconocidos cantantes Julión Álvarez y Alfredo Olivas se presentaron en el Estadio Olímpico Universitario de Chihuahua como parte de su gira “Prófugos del anexo, en las pedas y en los pedos”. El concierto, que duró más de cuatro horas, atrajo a miles de seguidores que disfrutaron de la música y el ambiente festivo.
Sin embargo, la euforia del evento se vio momentáneamente eclipsada cuando Alfredo Olivas comenzó a interpretar su tema “El malo de Culiacán”, conocido por ser un narcocorrido, durante el repertorio musical. En Chihuahua, este tipo de canciones están prohibidas en conciertos y presentaciones en vivo debido a su contenido que hace apología a la violencia y al crimen organizado.
A pesar de la prohibición, tanto Julión Álvarez como Alfredo Olivas iniciaron la canción, que también fue coreada por el público. Sin embargo, cuando llegaron al coro, la actuación tuvo que ser interrumpida abruptamente, ya que alguien del equipo les recordó que no podían interpretar ese tipo de temas en territorio chihuahuense.
Con risas nerviosas, Julión Álvarez pidió disculpas públicamente por el desacierto, reconociendo que se les había olvidado la normativa local. Además, ofreció disculpas al Gobierno de Chihuahua por no acatar el reglamento pertinente, que busca sancionar a los artistas cuyas letras promuevan actividades delictivas.
