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Descubre la serie más vista en MAX, a dos semanas de su estreno

La adaptación a la pantalla chica de la icónica novela de Laura Esquivel, Como agua para chocolate, ha conquistado rápidamente a los espectadores, alcanzando el primer lugar en el top 10 de la plataforma Max, donde comenzó a transmitirse el pasado 3 de noviembre. Esta serie, producida por Salma Hayek, revive la cautivadora historia de Tita de la Garza, una joven atrapada en el cruel destino impuesto por su madre, en una narrativa llena de pasión, magia y rebeldía.

La obra original de Esquivel, publicada en 1989, se convirtió en un fenómeno literario, siendo traducida a más de 30 idiomas y vendiendo millones de ejemplares. Su éxito fue tal que en 1992, el cineasta Alfonso Arau, en ese entonces esposo de la autora, la llevó al cine, obteniendo premios internacionales y una recepción extraordinaria tanto por parte del público como de la crítica. Ahora, en su nueva versión para televisión, la esencia de la novela sigue intacta, pero en un formato fresco y atractivo para nuevas generaciones.

La historia de amor entre Tita y Pedro, marcada por la lucha por la libertad y la rebelión contra las normas sociales, toma vida nuevamente en la pantalla, en una trama que no solo cautiva por sus emociones, sino también por sus elementos mágicos y sensoriales. En uno de los momentos más emblemáticos de la novela, Tita responde a Pedro: “El amor no se piensa. Se siente o no se siente”, marcando el inicio de un romance tan apasionado como complicado, que se desarrolla en el contexto de la Revolución Mexicana.

A través de los 12 capítulos del libro, Esquivel utiliza las recetas como un vehículo para contar la historia, uniendo la tradición culinaria mexicana con el realismo mágico, en un mundo donde los sabores y olores transforman a los personajes. Esta estructura es fielmente mantenida en la serie, con un enfoque en las emociones que la comida y los rituales familiares pueden evocar. Desde el pastel de boda que provoca melancolía colectiva, hasta las codornices con pétalos de rosa que incitan al frenesí, la magia del relato se combina con los sentidos para crear una atmósfera única.

Además de ser una historia de amor, Como agua para chocolate es un alegato por la libertad y el empoderamiento femenino. La novela pone de relieve el sufrimiento de Tita, la hija menor de la familia De la Garza, que debe sacrificar su felicidad para cuidar a su madre. El relato es también una denuncia contra la injusticia social y la opresión de las mujeres, reflejando la lucha de Tita por encontrar su voz en un mundo dominado por la tradición y el control paterno.

La adaptación a serie, con un elenco encabezado por Irene Azuela como Mamá Elena, Azul Guaita como Tita, Ana Valeria Becerril como Rosaura y Andrea Chaparro como Gertrudis, mantiene la magia del libro y la película original, mientras aporta una nueva visión al transformar este relato en una experiencia visual. Los cineastas Julián de Tavira y Analorena Perezríos dirigen esta serie que se ha rodado en locaciones emblemáticas de Tlaxcala y Ciudad de México, trayendo a la vida los paisajes que enmarcan esta historia única.

Para Salma Hayek, productora ejecutiva, la adaptación representa una oportunidad para llevar la cultura mexicana a un público global, destacando la importancia de contar historias que empoderan a las mujeres y celebran la riqueza de la tradición gastronómica. En palabras de la actriz: “Es una historia sobre el empoderamiento de las mujeres, en el sentido de que las mujeres tienen la capacidad de tomar el destino en sus manos”.

Con una mezcla de realismo mágico, pasión, tradición y lucha, Como agua para chocolate en su versión de serie promete seguir siendo una de las historias más queridas y emblemáticas de la literatura y el cine latinoamericano, mientras deja una huella en las nuevas generaciones de espectadores.